lunes, 26 de marzo de 2018

EL FICUS DE LA CONDESA DE RIPALDA (Árboles extraordinarios #6 )

El ficus de la Condesa de Ripalda.
Fotografía: Isabel Balensiya
PLA DEL REAL
Exposición. 
Ejemplar de Banyan bonsai

Callejero,quizás, estas fallas visitando la falla de Exposición, te hayas encontrado con este impresionante árbol, que se alza junto al muro de los Jardines de Monforte. Se trata de un antiguo ficus, concrétamente un ficus macrophylla – hoja grande, en griego - conocido comúnmente como Banyan australiano. Es una especie muy apreciada en el mundo del bonsái, ya que desarrolla unos troncos con unas formas muy atractivas. 


Sus troncos son de corteza gris y rugosa, macizos y gruesos, con prominentes contrafuertes en sus bases, que les da un aspecto de “derretimiento”, el cual se debe a que el árbol deja caer las raíces aéreas desde las ramas y estas alcanzan el suelo, penetrando en él y donde comienzan a engrosarse, creando otro tronco nuevo suplementario que ayuda a soportar el gran peso de las ramas. Además tienen la asombrosa facilidad de fusionarse unos troncos con otros, formando una gran masa leñosa. Es popular como árbol ornamental en parques, jardines y espacios de climas templados. Los viejos ejemplares pueden alcanzar extraordinariamente hasta los 60 metros de altura – 10 metros más que El Miguelete, imaginároslo – y su sistema agresivo de raíces limita mucho el espacio en las zonas públicas.

Ejemplar más grande de Ficus Macrophylla. 

230 años, 3000 raíces aéreas, y medio km de diámetro de copa.

 Las raíces forman nuevos troncos, prácticamente es un bosque de

 un solo árbol Jardín Botánico de Calcuta. La India. 

Poderosas raíces de Banyan en templos abandonados de la India.
Germinan en cualquier sitio y las raíces se alargan hasta llegar al suelo. 

Esta variedad de ficus es originaria de la India, Sri Lanka y de Australia, donde crece por las regiones de Atherton, Illawarra y Moreton.


Vista del tronco del gran ficus del antiguo Palacio de Ripalda.
Fotografía Isabel Balensiya

¿Pero, qué tiene de especial el ficus macrophylla que crece junto a Monforte?

Antigua fotografía coloreada
del Palacio de Ripalda.
Ubicación del Ficus.
Montaje: Isabel Balensiya

Pues que a parte de tener 127 años, es el único vestigio del antiguo Palacio de Ripalda, símbolo de que en un tiempo atrás existió allí en ese lugar, un palacete de ensueño, perteneciente a la condesa María Josefa Paulín de la Peña, viuda de Joaquín de Agulló y Ripalda.

En 1891, la condesa solicitó los servicios del Jardinero Mayor de Valencia, Fernando Llopis, para que le diseñara los jardines de su bello palacio. El jardinero aconsejó a la señora condesa plantar este ficus, porque estaba de moda entre las familias más adineradas de Francia, según él había visto en un viaje que había realizado, pues los jardineros visitaban las tierras francesas por la similitud  con el clima de Valencia y volvían con novedosas ideas de jardinería.

El tiempo pasó por los jardines de la condesa, hasta que en 1968 se decidió derribar el Palacio de Ripalda, debido a una reforma urbanística en la zona. Este hecho  llenó de leyendas urbanas, cada una más fantasiosa que la anterior, el colectivo valenciano. Los demoledores llamarón a Vicente Peris, el Jardinero Mayor, para inquirir sobre la forma más económica de eliminar este grandioso árbol, y despejar el solar para una construcción moderna: La Pagoda. El jardinero, en una romántica defensa secreta por ese ficus, convenció a los constructores de que podaran todas las ramas del gran árbol y de que este moriría y  sería más fácil eliminar el viejo tronco muerto. 


Palacio de Ripalda (izq.) y Edificio Ripalda "La Pagoda" (der.)
Ubicación del ficus y visión desde el Paseo de la Alameda.
Fotomontaje: Isabel Balensiya

Detalle del tronco del ficus macrophylla, donde se aprecian
 las fusiones de las raíces áreas creando ese esculpido tronco.
Fotografía: Isabel Balensiya.


Los obreros, desconociendo el poder de regeneración del ficus, amputaron salvajemente y de forma drástica todas y cada una de las ramas de este centenario árbol.- Los que os dediques al bonsái sabréis que para vigorizar un ficus, basta con podarlo para que rebrote con fuerza-.  Pero por supuesto, la maniobra les salió mal, ya que al poco tiempo el ficus rebrotó con una fuerza descomunal, haciéndose más potente y creciendo aún mucho más.

Panorámica del poderoso ficus Banyan junto a "La Pagoda"
Fotografía: Isabel Balensiya.

El Ficus de la Condesa ganó la batalla al tiempo y al espacio, y ahora a los pies de La Pagoda, se alza desafiante, aguantando cualquier cosa, como un bravo legionario, en la entrada de la plaza  de la Legión Española.


Ubicación en el plano de Valencia.
(Clicar para ampliar)


Todas las entradas de los árboles extraordinarios de Valencia, se las dedico a mi abuela, quien me transmitió la afición por la jardinería, y el gusto por los árboles contándome las historias y nombre de todos ellos,  junto con el de las flores.